La experiencia de formación vivencial supone el aprendizaje desde la interacción de distintos elementos, de orden conceptual, de saberes tradicionales y de prácticas sanitarias concretas. Esta formación se materializa a partir de la interacción del/la estudiante con actores significativos en salud perteneciente a distintos sistemas de atención, tomando conocimiento directo en una experiencia en territorios caracterizados por su diversidad y complejidad socio cultural y económica, así como la existencia de distintos modelos de atención y gestión de la salud en diálogo con dicha realidad multicultural.